miércoles, 9 de abril de 2014


CAPITULO 01

 -medico, por favor… ayúdeme. Mi dongseng está muy grave… - suplico el hombre a mi lado. Lo mire confundida, pero recordando las palabras de la jefe de piso “no se dejen llevar, por los sentimientos; en este oficio somos los expertos y debemos ser cuidadosos al brindar diagnósticos”
 – ¿qué pasa? Por favor respire y dígamelo.- dije evaluando la expresión del hombre que se encontraba conmigo.
El aludido un poco más alto que yo se arrodillo y con lágrimas en su rostro dijo: -es mi hermana, tiene fiebre alta y esta convulsionando… por favor ayúdale.- no lo mire siquiera; solo corrí por el pasillo, que me pareció angosto y muy largo, para llegar a la sala donde se encontraba la urgencia. Cuando pare para tomar un poco de aire, respire profundo y mire a mí alrededor. 
En una camilla se encontraba una niña de aproximadamente catorce años de edad, temblaba y encima de ella dos de mis jóvenes compañeros los cuales estaban a punto de graduarse; a mi aun me faltaban seis meses más de prácticas. Ellos intentaban reanimarla le pegaban en el pecho y  lo masajeaban. Luego utilizaron un desfibrilador; lo cargaron y al hacer contacto con el pequeño cuerpo de la niña, este salto y sus signos vitales funcionaron otra vez. Yo corrí para auxiliar a mis compañeros; le colocamos oxígeno y la dejamos reposar…
Los jóvenes médicos (Kiseop Lee y Kevin Woo) daban un par de recomendaciones a una mujer de edad, supongo que la omma de la niña y salieron de la habitación despidiéndose con la mano de mí.  Mire por última vez el rostro de la pequeña, el cual estaba un poco pálido, pero aun así no escondían los hermosos hoyuelos que poseía; me despedí de la mujer y Me encamine hacia la puerta de salida.
 El hombre que minutos antes había acudido a mí para pedir ayuda, se me acerco; pensándolo bien y tomándolo todo con calma no parecía mucho mayor que yo, es más podría aventurarme a decir que éramos de la misma edad. Este con al parecer ojeras en su rostro, me brindo la mano y con un asomo de pequeña sonrisa, dijo: -medico, no sé qué hubiera sido de mi hermanita, sino hubiera sido por usted…- confundida como estaba, por estar pensando en otra cosa que no fuera el trabajo; solo pude sonreír y decirle, que no se preocupara, que la pequeña estaría bien.
 Me aleje de él.
Meditabunda como estaba y distraída por el historial clínico de la niña, la cual respondía al nombre de Ivi Kim, no me fije y al entrar en un ascensor, me tropecé; mientras caía rogué por no pegarme fuerte en la cara y como acto reflejo, pose mis manos delante de mí, para no ser saludada por el piso frio del hospital. Algo me detuvo a pocos centímetros de él; mire a mi alrededor y solo vi rostros sorprendidos alguien me había tomado por la cintura y evito mi inminente caída. Voltee para agradecer a mi salvador(a) y hay estaba él, como caído del cielo.
 –disculpe médico, solo quería volver a agradecerle por lo que hizo por mi dongseng y decirle que mi nombre es Eli, Eli Kim.- me levanto del todo y soltó mi cintura. Me avergoncé y sacudí la bata que tenía puesta. 
–no se preocupe señor Kim, ya le dije que su hermana estará bien, solo fue el susto; ha y gracias por rescatarme, no es una buena noche para accidentes laborales.- bromee
Me aleje una vez más de él. Llegue a la habitación de descanso de los médicos practicantes; hay se encontraban el par de médicos que habían ayudado a la niña. 
–¡¡ya!! Ema, ¿qué tal las cosas con ese chico de la habitación 330?- confundida no respondí nada y Kevin dijo: -agasshi, el oppa de la pequeñita de lindos hoyuelos. Estaba que te comía con la mirada.-
 Kiseop rio por lo bajo; yo con la boca abierta y preguntándome la razón de su comentario me senté en uno de los muebles desocupados; nadie dijo nada, así que me puse los audífonos y cerré mis ojos… cuando recordé que estaba en turno, brinque de un salto y me encontré sola en la sala de descanso, Salí de ahí y me encontré con un grupo de compañeros que hablaban por lo bajo acerca de una prueba.
 –yo escuche que la perdieron- decía una joven estudiante.
 –Pues yo acabo de ver su puntaje y no les fue nada mal.- respondió otro médico. 
–no se confíen, esa cámara no es ninguna mentira.-
-¿Que paso?- pregunte confundida y muy desubicada.
 – ¿Acaso no lo sabes?- me pregunto otra compañera. Sin darme tiempo de responder a su pregunta dijo: -sucede que hicieron una prueba de reacción de urgencia a unos practicantes y no se sabe cómo les fue; hay muchas especulaciones, pero nada concreto. Solo dicen que pronto mostraran el video.-  
Esperamos todos en el anfiteatro del hospital, queríamos saber de qué se trataba todo ese alboroto.
-buenos días chingu’s.- dijo el Sangsenim del hospital, tocándose ambas manos. –como ya todos saben se hizo una prueba de reacción y aquí está el resultado.- nos indicó que miráramos a la pantalla gigante y vi reproducirse la escena completa de la reanimación de Ivi… Dios mío yo estaba involucrada en eso. Los compañeros que tenía más cerca me miraban anonadados. Yo quería encogerme y salir de ahí.  
–bueno alumnos, cuéntenme ¿que vieron de malo hay?- hubo una lluvia de respuestas como, “los médicos no utilizaron EPP” “No alejaron a los familiares” “no se apoyaron entre ellos” en fin, no quería seguir escuchando eso, quería salir de ahí en ese mismo momento.
-eso es excelente chicos; pero la verdad es que quiero felicitar a sus compañeros; su reacción (que es lo que se está midiendo en este ejercicio) fue maravillosa.-
 wow me había salvado; que bien. Después de eso, todos me felicitaron junto a Kevin y Kiseop. Salí del anfiteatro triunfante y con esa alegría me dirigí hacia mi casa; mi turno había acabado y yo después de ese par de sustos, ya había tenido suficiente.
-ya, Ema… espera: ¡¡felicidades!!- dijo Kiseop que se encontraba recostado en la pared de la salida de personal del hospital.
- kamsamnida Kiseop, pero para ti también; felicidades.- sonreí complacida, por haber superado la prueba con él y Kevin. -¿esperas a Kevin?- pregunte, aun sabiendo la respuesta.
-ne, se supone que iremos a celebrar juntos.- dijo Kiseop con una sonrisa grande en su rostro. -¿quieres venir con nosotros?- espero mi respuesta.
-mianhe; pero estoy muy cansada y además no quiero hacer mal tercio.- yo sabía que Kiseop está enamorado secretamente de Kevin, no era capaz de mostrarle sus sentimientos, por miedo a que lo rechazara; claro sin saber que Kevin también lo amaba. Esos dos están enamorados uno del otro, sufren en silencio y se conforman con ser solo amigos. Una historia digna de contar. Pero no sería yo quien se metería en su relación; ambos sabían que no podían ocultar sus sentimientos conmigo. Así que preferían desahogarse en mi presencia, Para no mostrar su dolor frente al otro.

BY: .·Ema·.  

jueves, 27 de marzo de 2014

DEMONIOS EN EL CIELO, ANGELES EN EL INFIERNO... BY: ஐ.·Ema·.ஐ


Sinopsis


Soy patética, después de ser una mujer tan estudiada y experimentada en el campo de la medicina;  Un poco escéptica en lo que concierne a la religión. Ahora creyendo en historias irreales y en seres imaginarios. ¿Quién se creen que son? a si… odio esto ¿de cuándo acá soy tan esencial Para ellos? Esto tiene que acabar, tengo cosas en que pensar, gente que salvar y ahora estoy en una bóveda como esta, indefensa y al lado de tan semejante custodio. Solo a dos tipos de personas les pasan estas cosas. A las de los dramas y a mí. Esto me faltaba, ser la doncella quien tiene que ser rescatada por su salvador. Estupidez, hace mucho deje de leer libros acerca de seres míticos por esa razón. Hacen volar mucho mi imaginación. ¿Qué voy hacer? No merezco este trato.


BY: .·Ema·.